⁃ La histórica «relación especial» entre Colombia e Israel se ve transformada bajo el mandato de Petro.
Nueva York.- Lo que alguna vez fue una «relación especial» entre Colombia e Israel, dos de los vértices de un triángulo estratégico con Estados Unidos, parece haber perdido su forma este miércoles 1 de mayo. El presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel después de meses de un deterioro acelerado de los vínculos entre ambos países. Su decisión fue certificada horas después en un comunicado de la Cancillería colombiana.
«Esta decisión se dirige exclusivamente a la ruptura de relaciones diplomáticas y nunca contra el pueblo israelí ni contra las comunidades judías, ya que nos unen lazos históricos y de amistad que persistirán», según la Cancillería. Sin embargo, el anuncio de Petro marca un cambio radical en la política exterior de Colombia, que tradicionalmente había mantenido una estrecha relación con Israel, basada en la cooperación en áreas como la seguridad, la tecnología y la agricultura.
El anuncio de Petro ha generado reacciones encontradas tanto a nivel nacional como internacional. Mientras algunos sectores respaldan su decisión como un acto de solidaridad con el pueblo palestino y una postura en defensa de los derechos humanos, otros critican la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel como un movimiento precipitado que podría tener consecuencias negativas para Colombia en términos económicos y geopolíticos.