⁃ La nueva medida busca controlar el flujo migratorio y fortalecer la seguridad fronteriza, generando críticas y apoyos divididos.
Miami.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, emitió este martes una orden ejecutiva que busca restringir el acceso irregular de migrantes al país y endurecer los requisitos para obtener asilo. La medida, anunciada desde la Casa Blanca, forma parte de un esfuerzo más amplio para abordar el creciente desafío de la inmigración ilegal y mejorar la seguridad en la frontera sur.
Según la orden ejecutiva, las nuevas restricciones incluyen un aumento en las verificaciones de antecedentes, la implementación de procesos de asilo más rigurosos y el despliegue de recursos adicionales para patrullar y asegurar los puntos de entrada clave. La administración Biden ha enfatizado que estas medidas son necesarias para disuadir el cruce ilegal y garantizar que los procesos de inmigración sean seguros y ordenados.
Las reacciones a la orden ejecutiva han sido mixtas. Los defensores de los derechos de los migrantes y varias organizaciones humanitarias han expresado su preocupación, argumentando que las nuevas políticas podrían poner en peligro a aquellos que buscan escapar de la violencia y la persecución en sus países de origen. «Este es un paso atrás en la protección de los derechos humanos y en el compromiso de Estados Unidos con el asilo», declaró María Hernández, portavoz de la organización Human Rights Watch.
Por otro lado, varios legisladores y líderes comunitarios en áreas fronterizas han mostrado su apoyo a la medida, destacando la necesidad de mantener la integridad de las fronteras y prevenir el tráfico de personas. «Es crucial que tengamos un sistema migratorio que funcione y que proteja tanto a los migrantes como a los ciudadanos estadounidenses», señaló el senador Mark Kelly de Arizona. La administración Biden se encuentra en una posición delicada, buscando equilibrar la seguridad nacional con la tradición estadounidense de ofrecer refugio a quienes lo necesitan.