– Una curiosa forma de devoción hacia celebridades juveniles se transforma en un fenómeno cultural y económico en medio de la desaceleración del país.
Tokio.- En la bulliciosa estación de trenes de Shinjuku, en Tokio, los anuncios suelen promocionar productos de consumo masivo como snacks, perfumes o películas. Sin embargo, no es raro que los viajeros se topen con algo distinto: un cartel colorido con la imagen de un joven artista, a menudo perteneciente a una banda musical, acompañado de un mensaje de cumpleaños o agradecimiento.
Estos anuncios no forman parte de estrategias comerciales tradicionales. Son el resultado de campañas organizadas por seguidores comprometidos, quienes invierten dinero en colocar este tipo de mensajes. Detrás de estas iniciativas se encuentra el fenómeno conocido como oshikatsu, una palabra que surge de la combinación de oshi (ídolo o figura admirada) y katsu (actividad), y que describe todas las acciones que realizan los fans para mostrar su apoyo.
Lejos de ser solo una moda pasajera, el oshikatsu se ha convertido en una fuente alternativa de dinamismo económico. Desde la venta de mercancías exclusivas hasta viajes organizados para eventos relacionados con sus ídolos, esta cultura fan está moviendo millones de yenes y generando empleo en sectores como la publicidad, el entretenimiento y el turismo.
El gobierno y expertos en economía ven en este fenómeno una posible vía para estimular el consumo interno, especialmente entre los jóvenes. En tiempos en los que Japón enfrenta un estancamiento económico, movimientos como el oshikatsu demuestran cómo la pasión colectiva puede convertirse en motor de crecimiento.