– Venezuela, migración y la influencia de China son temas claves en los planes de Harris y Trump para la región latinoamericana.
Caracas.- América Latinaha ocupado un papel secundario en la campaña de los candidatos Kamala Harris y Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, sin embargo, la región plantea desafíos urgentes que cualquiera de los dos deberá afrontar tras los comicios del próximo 5 de noviembre. Temas como la respuesta al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela, la creciente migración hacia la frontera sur y la influencia de China en el continente serán cuestiones clave en la agenda del futuro presidente estadounidense.
Uno de los puntos de mayor divergencia entre ambos candidatos es el enfoque en el tema migratorio. Donald Trump ha centrado su campaña en la idea de “control y seguridad fronteriza”, y ha criticado repetidamente a la administración actual por no frenar el flujo de migrantes que llega a Estados Unidos desde América Latina. Para Trump, la migración es una amenaza que debe controlarse con medidas estrictas, incluyendo el refuerzo de la vigilancia en la frontera y políticas restrictivas para desalentar la migración.
Por otro lado, Kamala Harris ha adoptado una postura más inclusiva en torno a la migración. Harris sostiene que la solución a la crisis migratoria pasa por abordar las causas de raíz en los países de origen, como la pobreza y la violencia, que empujan a las personas a abandonar sus hogares. Su propuesta incluye cooperación con los gobiernos latinoamericanos para fortalecer sus economías y mejorar las condiciones de seguridad, en un intento de reducir la presión migratoria de forma sostenible y estructural.
El papel de China en América Latina es otro aspecto de contraste entre las propuestas de Harris y Trump. Mientras que Trump ve la influencia de China como una amenaza directa y considera necesario implementar políticas que contrarresten su presencia, Harris ha mostrado una actitud más abierta a la cooperación, siempre que esta respete la soberanía de las naciones latinoamericanas. Para Harris, contrarrestar la influencia china pasa por fortalecer las alianzas regionales en lugar de imponer condiciones restrictivas, lo que marca una diferencia notable en cómo cada candidato pretende posicionarse frente a los desafíos de América Latina.
