– El consumo de carbón se desploma a niveles insólitos, marcando el descenso más pronunciado en casi 150 años.
Londres.- En un giro sin precedentes, las emisiones de gases de efecto invernadero de Reino Unido han experimentado una reducción sin parangón desde 1872. Esta notable hazaña se ha logrado debido a un drástico descenso en el uso del carbón, lo que posiciona al país a la vanguardia en la lucha contra el cambio climático.
La disminución del consumo de carbón ha alcanzado cifras que no se habían visto desde el siglo XVII, contribuyendo significativamente a la baja histórica en la emisión de carbono. Los datos reflejan una transformación en las políticas energéticas, que han impulsado la adopción de fuentes renovables y tecnologías más limpias.
Expertos en medio ambiente y economía destacan que este cambio no solo favorece la salud planetaria, sino que también abre nuevas oportunidades de crecimiento sostenible. Las inversiones en energía solar, eólica y otras alternativas han mostrado ser decisivas para minimizar la dependencia de combustibles fósiles y reorientar la matriz energética nacional.
Este logro marca un antes y un después en la estrategia de reducción de emisiones del Reino Unido. Las autoridades continúan promoviendo iniciativas que incentiven la innovación y la eficiencia energética, posicionando al país como un ejemplo a nivel internacional en la transición hacia un futuro más respetuoso con el medio ambiente.
