– Científicos del CNIO en Madrid desvelan una ruta molecular que activa la reparación del hígado mediante este aminoácido.
Madrid.- Un grupo de expertos del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) de Madrid ha identificado un novedoso mecanismo por el cual el glutamato —un conocido neurotransmisor y metabolito— desencadena la regeneración de las células hepáticas. Este hallazgo abre la puerta a nuevas estrategias para tratar enfermedades crónicas del hígado y a optimizar los procesos de recuperación tras intervenciones quirúrgicas.
Según los investigadores, la clave reside en la unión del glutamato a receptores específicos situados en la membrana de los hepatocitos. Al activarse, estos receptores inician una cascada de señales intracelulares que culmina en la expresión de genes fundamentales para la proliferación celular y la reparación de tejidos dañados. Hasta ahora, el papel del glutamato se había estudiado sobre todo en el sistema nervioso; este estudio demuestra que su función es mucho más amplia.

Las pruebas de laboratorio, realizadas tanto en cultivo celular como en modelos animales, confirmaron que una administración controlada de glutamato después de una lesión hepática multiplica la velocidad y eficacia de la regeneración. Los análisis de biología molecular revelaron un aumento significativo de marcadores de división celular y de factores de crecimiento, sin observarse efectos tóxicos ni fibrosis excesiva en los tejidos tratados.
Este descubrimiento podría traducirse pronto en terapias innovadoras para pacientes con cirrosis, hepatitis crónica o quienes se someten a resecciones quirúrgicas del hígado. Los autores del estudio apuntan que, al modular con precisión las dosis de glutamato, se podría potenciar la capacidad de autorreparación del órgano, reduciendo la necesidad de trasplantes y acortando los tiempos de hospitalización.
El equipo del CNIO, liderado por la investigadora Dra. Elena Montes, confía en que estos resultados permitan iniciar ensayos clínicos en los próximos años. “Estamos ante un mecanismo sorprendente que aprovecha una molécula natural para activar rutas de sanación que hasta ahora no se habían explorado en el hígado”, declaró. Los científicos se encuentran ya diseñando protocolos para evaluar la seguridad y eficacia de este enfoque en voluntarios sanos antes de aplicarlo a pacientes con daño hepático avanzado.
