– Nuevas evidencias apoyan la teoría de que la superficie lunar se formó a partir de un vasto mar de roca líquida hace 4.500 millones de años.
Agra.- Un reciente hallazgo en la Luna ha revelado una pieza clave en la comprensión de su formación. Científicos han descubierto lo que se cree que fue un «océano de magma» extinto en el polo sur de nuestro satélite natural. Esta nueva evidencia respalda la teoría de que la Luna, en sus primeras etapas, albergó vastas cantidades de roca fundida que eventualmente dieron forma a su superficie actual.
El hallazgo fue posible gracias a la misión Chandrayaan-3, lanzada por la India y que hace un año logró un aterrizaje histórico en el polo sur lunar. Desde entonces, el rover de la misión ha estado recopilando datos que han permitido a los científicos identificar restos de lo que alguna vez fue un océano de magma. Estos restos ofrecen una visión única sobre el pasado volcánico de la Luna y sugieren que esta área estuvo cubierta por un mar de roca líquida hace miles de millones de años.
La teoría de un océano de magma en la Luna no es nueva, pero hasta ahora no se habían encontrado pruebas tan contundentes. Según los investigadores, el calor extremo generado por los impactos y la acumulación de material tras la formación de la Luna habría creado un mar de roca fundida que cubría su superficie. Con el tiempo, este océano de magma se enfrió y solidificó, formando la corteza lunar que vemos hoy.
Este descubrimiento no solo profundiza nuestro conocimiento sobre el origen de la Luna, sino que también abre nuevas preguntas sobre la evolución térmica y geológica de otros cuerpos celestes. Los científicos esperan que los datos adicionales de la misión Chandrayaan-3 sigan revelando más sobre los primeros días de la Luna y cómo su formación pudo haber influido en la historia del sistema solar.